Robin Williams siempre estaba triste.

Me encantan las películas de Robin Williams y es una lástima que hace casi 6 años haya decidido terminar con su vida, aunque la verdad, seguro su vida ya había acabado tiempo antes. Imposible de saberlo, pero esa decisión de cortar todo en un solo suspiro debe ser muy difícil de tomar... La verdad no sé, y mejor ni siquiera menciono cómo es que se puede llegar a esa conclusión. Dejemos esto a los psicólogos.

La cuestión es que hace un par de días vi una película de Robin llamada "One Hour Photo",que al castellano se tradujo como "Retratos de una Obsesión", en 2002. En ella, Williams es un asocial técnico de fotografía que observa cómo sus días se sumergen en la rutina de atender a todos los clientes de un supermercado.

Robin Williams terminó con su vida el 11 de agosto de 2014.

Allí llegó la familia Yorkin 9 años atrás a revelar sus fotos, y Robin (Sy Parrish en la película) empieza a tomarles cariño a tal punto de considerarlos su propia familia. Sy era un persona triste, y al final al descubrir la infidelidad del padre de familia, Will, decide exponerlo como el destructor de la misma.

Al final de la película se revela que Sy tuvo problemas en su niñez, mismos que lo llevaron a tener una vida triste, solitaria y casi sin sentido. 

Menciono esta película a manera de spoiler, porque si vemos más películas de Robin Williams, notaremos que hay cierta nostalgia o melancolía en su mirada, en su sonrisa; y que además en todas sus películas (quizás exceptuando alguna que no recuerdo) siempre fue una persona noble que trataba de hacer sentir mejor a los demás.

Ejemplos claros de esto son Hook en 1991 donde interpreta a Peter Pan, y Mrs. Doubtfire en 1993, donde se disfraza de señora para poder estar cerca de sus hijos. 

De alguna manera, recordando ahora, se nota que en Williams hay un aire de ternura sin egoísmos que nos hace amar sus interpretaciones. A la vez, debemos recordar que Williams inició su carrera en la comedia, siendo, de hecho, uno de los mejores comediantes que yo he visto en mi vida. Incluso recuerdo una breve participación que tuvo como invitado en Friends, donde fue impresionante.

Sí, señoras y señores, Robin Williams siempre estaba triste. Y su desenlace lo comprueba, y la manera en que trataba de hacer sentir a los demás, lo corrobora. Y eso me da mucha tristeza.

¿Qué podemos hacer actualmente?

Seamos amables, seamos corteses, digamos buenos días y con permiso, y sobre todo, por favor y gracias.

Tan sencillo como eso.

Nunca sabemos quién carga una pena muy pesada sobre sus hombros, por eso es que no debemos perder la educación, la amabilidad y la certeza de que con gestos tan mínimos como un saludo o una sonrisa, podemos salvar vidas.

Muchas gracias.